Después de la primera competición, empezó a gustarme más esto del judo, y poco a poco iba entendiendo más y más la filosofía que conlleva hacer judo. el judo no es un deporte agresivo ni que incite a la violencia, todo lo contrario, se respeta mucho tanto al profesor como a tus compañeros.
Del colegio recuerdo a varios compañeros más mayores que yo (tenian 14 años ufff que mayores) que normalmente eran los que me cuidaban (Silvestre y Chema). Tambien pasaron muchos compañeros mios de clase que se apuntaban un año y al siguiente se lo dejaban, y otros que duraron más, como Fernando, su primo Raul, Santi y su hermana, Mari Carmen.
Recuerdo mi primer examen para cinturón, nos llevaron a otro gimnasio y nos examinaban 5 profesores. Eso era un trauma en vez de un examen, 5 profesores que no habiamos visto nunca y encima para un niño de 4,5 años. Total sólo nos hicieron 4 o 5 preguntitas de técnicas, nos las podría haber hecho nuestro profesor.
Hasta los 9 años estuve en este gimnasio del colegio, y durante ese tiempo hicimos otra competición más que ya no gané, hicimos tres combates y perdí uno, con el chico que ganó.
En la próxima entrega empezare con el cambio de gimnasio......
Continuara......
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